Todo es energía
Piensa en algo, cualquier cosa. ¿Listo? Bien, pues cualquiera que sea lo que imaginaste, es energía. Todo a nuestro alrededor (y nosotros mismos) somos energía, y nos comunicamos a través de vibración.
Esta vibración es contagiosa, de modo que podemos modificarla de una forma consciente. ¿Cómo? Puede ser de infinitas maneras, mediante acciones o elementos que te hagan sentir bien…
Por ejemplo hacer deporte, compartir un tiempo agradable con personas que amas, comer tu comida favorita… O podemos hacerlo también gracias a diferentes elementos, como podrían ser las velas, las piedras o los olores.
En este artículo, te hablaremos sobre el sahumerio y los inciensos, las dos maneras más increíbles de modificar nuestra vibración mediante el olor, pues tienen la capacidad de cambiar la frecuencia de nuestras vibraciones de forma casi inmediata.
Cuando hablamos de Sahumerio, nos referimos a la acción de “Sahumar”, que es dar humo aromático a algo o a alguien con el fin de purificarlo. Esta es una tradición muy antigua y sagrada que nos permite que la energía estancada vuelva a circular de manera correcta.
Las culturas ancestrales tenían mucha claridad sobre el poder que tiene la naturaleza de ofrecernos todo lo que necesitamos para poder sanar. Cuando llevamos a cabo la práctica del Sahumerio con plantas medicinales, estamos abriéndonos a la posibilidad de atraer calma, amor y pureza, y dejar ir todos aquellos sentimientos con los que no deseamos estar conectados.
Esta poderosa práctica consiste en hacer una quema de plantas o de minerales con olores específicos, que atraigan el tipo de vibración que estamos buscando, lo que permitirá que nuestro ambiente se armonice y comience a “vibrar en positivo”. El incienso, a su vez, es el mismo acto solo que de una forma «comprimida», por lo que bastará con prender el palito de incienso, que tendrá el mismo efecto que la quema de hojas.
Cuando hacemos rituales, el sahumerio o incienso se utiliza para conseguir subir o ajustar la energía de la persona o del ambiente en el que se está realizando. Cuando lo usamos para meditar, su misión es ayudar a la persona a conseguir un estado de mayor claridad, calma y enfoque, para poder conectar más profundamente con todos sus cuerpos.
Estos Sahumerios podemos usarlos en dos direcciones; bien para atraer buenas energías y cosas positivas a cualquier área de nuestra vida, o bien para alejar malas energías con las que no deseemos seguir conectándonos.
¿Qué necesito para realizar mi sahumo?
- ¡Un recipiente que pueda soportar el calor de una quema! Lo ideal es que sea de barro o cerámica. Si te gustan las manualidades, te invitamos a que crees tu propio recipiente para sahumerios, con la decoración personalizada que más encaje contigo.
- Carbones vegetales. Son unos carbones que vienen en forma redonda y chiquita.
- Las hierbas que hayas escogido quemar según la intención con la que realizas el sahumerio.
- Y por último, ¡claridad en tu propósito! Antes de realizar el sahumerio, puedes preguntarte a ti mismo algo como… ¿Por qué estoy haciendo hoy esto? ¿Qué quisiera atraer a mi vida? ¿Salud, tranquilidad, confianza en mí mismo? Piensa en esto y, una vez que tengas clara tu intención, ponte manos a la obra.
¿Cuándo debería sahumar?
Realmente no existe una limitación a la hora de realizar prácticas que nos hagan sentir mejor. Simplemente esta es una pequeña orientación sobre en qué momentos podría ser muy beneficioso para ti.
- Cuando sientas en ti una energía pesada o incómoda.
- Cuando cambies de lugar de residencia o de trabajo.
- Cuando necesites cerrar asuntos del pasado para poder avanzar.
- Cuando necesites un momento de desconexión y autocuidado (sí, así mismo, sin excusa).
¿Cómo debo hacer mi sahumerio?
- En primer lugar, el espacio en el que vayas a realizarlo debe estar limpio, para que esta energía renovada pueda fluir sin complicaciones.
- Prende los carbones en tu recipiente y permite que el primer humo que se desprenda salga de la habitación en la que te encuentras, para que no se quede retenido.
- Cuando hayas hecho esto, agrega al cuenco todas las hierbas que hayas escogido para tu sahumerio y comienza a purificar la habitación en la que te encuentras. Te recomendamos que inicies por las esquinas, pues es aquí donde siempre se acumula la energía estancada.
- Cuando hayas terminado, puedes rodearte también de este humo purificante y tras ello, deja que el carbón se apague de una forma natural, dejando las ventanas abiertas, para que el humo pueda llevarse consigo todo aquello que no deseas seguir manteniendo en tu vida.
¿Cómo te suena esta práctica?
Desde Avalom Quest siempre estamos buscando la manera de equilibrar nuestra energía y nuestros cuatro cuerpos. En este caso, fue el turno de los olores, pero existen infinidad de elementos que nos pueden ayudar a hacerlo. Si te surge cualquier duda, no dudes en escribirnos, estaremos encantados de ayudarte en lo que necesites.